Seguridad humana en Colombia

Por primera vez en Colombia hay una política gubernamental que incluye la seguridad humana como su principal pilar. Pero ¿Qué es la seguridad humana?
El concepto de “Seguridad humana” fue acuñado por las Naciones Unidas tras la publicación del Reporte de Desarrollo Humano de 1994. Este reporte señalaba la imperante necesidad de lograr la seguridad desde una perspectiva integral que garantice la tranquilidad de los ciudadanos, no solo reduciendo la delincuencia sino interviniendo las necesidades insatisfechas, lo cual a la larga reduciría la violencia.
Dos criterios son claves:
1. Seguridad respecto a las amenazas críticas como hambre, enfermedad y represión.
2. Protección de los ciudadanos de eventos violentos en su vida cotidiana (trabajo, hogar y comunidad).
Desde esta perspectiva las políticas de seguridad deben buscar la eliminación de las “causas objetivas” de la violencia, articuladas a mecanismos legales, participación ciudadana y el uso adecuado de las fuerzas armadas. La meta es construir un ambiente ideal para que la gente lleve a cabo sus actividades cotidianas sin temor a la violencia y donde pueda desarrollar sus potencialidades plenamente sin restricción.
Así, la seguridad humana es un concepto universal donde todos los componentes son interdependientes; se promueve la prevención más que la intervención; hay un énfasis en las personas más que en la protección de las instituciones del estado. Todo esto buscando la convivencia, y establecimiento de un pacto social que permita acceder al mercado y diferentes oportunidades sociales y políticas.
Pero, implementar la seguridad humana ha sido una labor difícil en varios países por tres factores. Primero, falta de voluntad política. Segundo, una visión retrograda que señala que la inseguridad e inestabilidad solo se reduce usando el aparato coercitivo del estado contra la delincuencia, el narcotráfico, los grupos ilegales, entre otros. Tercero, debido a las dificultades para separar las labores de desarrollo humano, llevadas a cabo por instituciones civiles dentro del estado, y las que promueve el concepto de seguridad humana, que en algunos países han sido coordinadas por ministerios de seguridad o en el caso de Colombia, desde el Ministerio de Defensa que no tienen las competencias para intervenir en asuntos no policiales o militares (1).
Así, algunos expertos hablan de la necesidad de una adecuada coordinación política que permita combinar un trabajo entre diferentes agencias gubernamentales.
De la mano del concepto de seguridad humana, surgió el concepto de “reforma del sector seguridad” (Security Sector Reform), que promueve el fin de una perspectiva “securitizada”, o de uso exclusivo de la fuerza y la represión para manejar problemas de seguridad e incluso sociales. Esta perspectiva promueve reformar las instituciones de seguridad para que reflejen y promuevan la democracia.
Esto la larga permite un desarrollo económico sostenido. Para el autor Alex Bellamy, esto conduce a una “Paz Democrática”, donde la prosperidad y seguridad van de la mano, generando potencialidades para un país, como se puede observar en el siguiente diagrama (2).

En esta perspectiva, las instituciones encargadas de la seguridad siguen cumpliendo sus funciones, pero se hacen más claras y horizontales, donde hay corresponsabilidad con la sociedad civil por medio de veeduría y participación ciudadana.
Entonces, la reforma al sector seguridad incluye: Establecimiento de estructuras de control civil por parte del presidente y el congreso; definición de roles adecuados para las instituciones civiles y militares respecto al tema de la seguridad; adecuado entrenamiento de los miembros de las instituciones de seguridad en derechos humanos, particularmente de los militares si estos son involucrados en labores internas; participación y veeduría ciudadana en los asuntos de seguridad y las instituciones a cargo.
Por años en Colombia ha prevalecido el concepto de seguridad nacional, donde la defensa de la institucionalidad y control del territorio han predominado sobre el bienestar de los ciudadanos, quienes han sufrido la inclemencia de la inseguridad y la violencia. La desigualdad es un problema crítico que genera inseguridad. De ahí la que la seguridad humana al ser concepto integral busca articular políticas que permitan abordar y solucionar estas dificultades.
El bienestar y tranquilidad de los ciudadanos es un pilar fundamental de la seguridad humana, el cual junto a la reforma de las instituciones de seguridad deben tener como meta generar un desarrollo social, económico y político sostenible a lo largo de los años.
(1) Rodriguez, Saul M. (2010) “El salto al vacío”: ¿Colombia de la seguridad nacional a la seguridad humana?, en Boletín Democracia, Seguridad y Defensa (Nro. 44), Quito: Pontificia Universidad Católica del Ecuador.
(2) Bellamy Alex (2003) Security Sector Reform: Prospects and Problems. Global Change, Peace and Security, 15 (2): 101-119.